Antonio F. Marín: El que rompe paga

2 de octubre de 2008

El que rompe paga


"Todo el sistema financiero mundial espera sus propuestas", le ha dicho Zapatero a Rajoy en un alarde de ingenio, un poco después de apoyar el plan Bush para pagarle las deudas a los codiciosos que cuando ganan no reparten, pero que cuando pierden buscan la ayuda de los demás para enjugar sus trapicheos.  No está mal, porque si Rajoy no tiene ni idea, es cierto, Zapatero apoya a los capitalistas salvajes, con un par, y es más papistas que el Papa y más republicano que
los mismos conservadores republicanos que se siguen negando a esta martingala en el Congreso norteamericano (60 % republicanos, 40% demócratas), porque allí la disciplina del partido se la pasan por donde deben, es decir, por los huevos, y saben que su compromiso es con sus electores porque son designados por ellos y no por el partido.

Todo lo contrario que aquí, en nuestra ejemplarizante democracia de listas cerradas, donde se vota al partido sin saber quién es el candidato. Ni puta idea de quién nos representa. Votamos al mogollón y se elige a unos diputados mansos y uncidos con la obediencia debida, que en el ejército se ha suprimido, pero que sigue vigente en partidos, asociaciones, columnas y tertulias. Pero en los odiados Estados Unidos se conoce que están por otros lópez, y los congresistas saben que se deben a sus electores y que éstos no están de acuerdo con que se pague con su dinero las pifias y los pufos de los millonarios.

Y quizás crean, como un servidor, que hay que echar mano a la cuenta de la vieja aquella de que "el que rompe paga", es decir, que cada palo aguante su vela y cargue con su responsabilidad en el desaguisado porque igualito, igualito, que a mí no me ayuda nadie si monto una empresa y fracaso, los especuladores que han jugado al Monopoly deben pagar lo que han hecho. Que quiebren, y si se va al carajo el sistema financiero pues mejor, qué quieres que te diga, porque saldrá uno nuevo, y escarmentado.

Muy escarmentado, porque con la compra de las deudas de los tiburones financieros el mensaje que le están dando a la buitrada es que no han de preocuparse por sus tropelías porque si les sale mal vienen al socorro Bush y Zapatero, para salvarlos y que no vaya gente al paro y todo eso. Por caridad, podría decirse. Una lección ejemplar. Se aprobará, pero no cuela porque cuando éramos pequeños se decía que "el que rompe paga", pero aquí el que rompe no sólo que no paga, sino que se va con la vajilla y encima los demás tenemos que limpiarle la casa.

Mobusi