El himno nacional (con upskirt)

Los espías del CNI han sido pillados por unos escoltas cuando vigilaban a un espía extranjero, según dice el Gobierno de Pepe Gotera y Otilio, chapuzas a domicilio, o sea, España misma sin ir más lejos, España camisa blanca de mi esperanza donde los espías no son el lechero que llama a las cinco de la mañana y los fiscales imparten títulos de periodismo y reparten credenciales democráticas. Así que no es de extrañar que se haya vuelto a liar, cómo no, con el afán de ponerle letra al himno nacional, tatachín, tatachán. Unos que no, otros que sí, y otros que se le ponga letra y que se
cambie la música. También se ha propuesto la vuelta al himno de Riego, el de la República, que dice que “la patria nos llama a la lid” y que hemos de “jurad por ella, vencer o morir”. A estos también les va la marcha patriotera y demás menudillos como acordarse de El Cid Campeador, de los “rugidos de cañones” y de las “trompas guerreras”. Tela. Así que con la letra del himno actual no hay acuerdo, como es natural y menuda polvareda se ha levantado (en Cieza dicen polsaguera). Y para evitar desmanes y gestos sañudos yo propongo la bandera que luce la chica de arriba por encima de las tetas. Y la letra del “Porompompero”:

Porompom pón, poropo, porompom pero, peró,
poropo, porom pompero, peró,
poropo, porompom pon.

Porque explica España mejor que Ortega. Mucho mejor.