Así que podemos estar tranquilos. No hay que alarmarse, porque estaremos bien representados por los turcos y ese sosiego nos permitirá dedicarnos otras empresas, porque yo también me he arremangado y voy a ayudar a solventar la crisis con arreglo a mis posibilidades. Y como la Bolsa sigue pachucha me he propuesto reavivarla invirtiendo en Telefónica, por ejemplo, que cerró
ayer a 13,92 euros después de bajar un 19,49% en el último mes y un 35,87% en un año. Y voy a tomar acciones en el asunto.
Porque Telefónica ha llegado a tener un precio de 23,26 euros el 6 de noviembre de 2007 y al precio actual de 13,92 euros, es una ganga para comprar pues tiene el mismo valor que tenía hace dos años (el 27 de septiembre de 2006). Quiere decirse que la compañía vale ahora lo mismo que valía hace dos años, y eso no es normal, ni se corresponde con la realidad, con su recorrido, con su análisis técnico, ni con el fundamental.
Si compro 500 acciones a 13,92, me gastaría 6.960 euros y como es seguro que dentro de poco la acción rebote en los 12,70 euros donde tiene un suelo muy fuerte desde hace años (son inversores que jamás venden pase lo que pase), a partir de ahí empezará el recorrido alcista y alcanzará en poco tiempo un precio de 18 euros que es lo que le corresponde, siendo muy pesimistas, y considerando que ha llegado a cotizar a 23 euros.
Y cuando alcance ese precio podré venderlas y sacar 4,08 euros por acción, lo que me supondría una ganancia de 2.040 euros en unos pocos días (unas 339.252 pesetas). Pero no tengo dinero. Podría pedir un crédito para comprar las acciones (opciones de compra), y es lo que voy a hacer porque una vez que las venda podré amortizar el crédito con sus intereses y ganar encima unos 1.300 euros, que no está nada mal. Y sin moverme de la silla, es decir, a través de CAM Directo. Y además es completamente legal. Así que eso es lo que voy a hacer.
Eso es lo que iba a hacer y que no voy a hacer, porque hace ya tiempo que no le tiro los tejos a ninguna lechera. Y porque estoy muy viejo para estos tejemanejes que son a los que han estado jugando algunos, pero a lo bestia y con miles de millones, mientras las familia pierden sus ahorros que se han situado en los niveles de 1992.
Porque los bancos siguen ganando, los especuladores juegan a crédito y los golfos siguen escondiendo el dinero negro en sus cajas fuertes pues hay 108 millones de euros en billetes de 500 euros, el 5,4% del PIB, mientras los curritos de siempre, que tampoco van a ir a ninguna cumbre, se ven forzados a acudir a Cáritas, de nuevo, para solventar sus apreturas.
