y ya no habrá dolor en mis ojos,
Serás, como ahora lo es él,
lo que un día fue,
las palabras amasadas en la piel del tiempo
Y serás sólo lo hermoso,
sólo,
lo que amé de tu mano.
Así, quedarán en mí
las caricias que llevaban tu nombre,
la boca ávida de futuros
en las esperas estremecidas,
y en mi sexo, siempre mi sexo,
reclamándote audiencia.
Mientras,
aguardo paciente,
a tus pies,
mi olvido.
Pura Salceda “m@ares online”
Sial/Fugger Poesía.