Amnistía Internacional ha denunciado "la crueldad" del régimen comunista cubano, tras la muerte de Orlando Zapata; un opositor que llevaba 83 días en huelga de hambre para exigir los derechos humanos más fundamentales. Era un preso de conciencia, un preso político que pedía libertad. Un obrero, un albañil, que ha muerto por la libertad y contra la tiranía, aunque les joda a algunos cerriles burriciegos que exigen libertad en Europa, pero callan como guarros ante la dictadura castrista. Pues ajo y agua.