En Japón han detenido a un vecino por tirar las cenizas de la esposa por el váter del supermercado. Mal, muy mal. Eso no se hace. Se tirán al mar. O en una montaña. O en un contendor de residuos radiactivos. «Es que la odiaba mucho», replicó cuando lo detuvieron.
«Perdona a tus enemigos, pero nunca te olvides de sus nombres», nos advertía el presidente americano John F. Kennedy, según recuerda en el Face mi apreciada Matilde Guardiola. Pues sí.
«El perdón es una cosa entre Dios y él. Yo sólo les facilito la entrevista». Y le pegó un tiro. Lo oí en una película, que conste, y no en un bar de Cieza. Pues eso: que perdone Dios que para eso cobra. Quizás por eso los políticos se perdonan mucho y los anticasta han pactando cargos de Gobierno con la casta. Se han perdonado. Y si es menester incumplir el programa electoral se cambia. No problemo. La política, es decir, la ambición política, hace que lleguen a masturbarse entre ellos, pero es que
esto más que pactos son ‘follamigos’.
Ciudadanos de Albert Caganet quiere ganar las próximas elecciones generales, por la cara, pero ya ha advertido que quiere paralizar los proyectos del AVE a Cartagena y Lorca para destinar ese dinero a I+D+i. No lo sabíamos, pero ya se le ha visto el cartón al Gardel catalán que no obstante tiene algún mérito: ha conseguido que dimita el pepero delegado del Gobierno, Bascuñana, por estar imputado, y sin
necesidad de agua caliente. A cada uno lo suyo y a cada cerdo su sanmartín.
IU está prácticamente disuelta como un azucarillo en manos de los de Podemos que querían «asaltar el cielo» y ahora sólo pintan en algunas ciudades y comunidades grandes. Y además proponen obligar a los propietarios que tienen pisos vacíos a alquilarlos, cuando no se alquilan porque si el inquilino no paga no puedes desahuciarlo.
Los desahucios por impago de alquiler son ya más que por hipotecas, por lo que el poncio propone obligarlos a alquilar y prohibir que los desahucien. Quizás sería mejor idear una bonificación a los arrendatarios que alquilen pisos con descuentos en el IRPF o pagarle el alquiler o la vivienda social a los desahuciados porque cuantos más desahucios haya habrá más pisos en alquiler. Y viceversa.
La cuestión radica en que no alquilas si te prohíben echar/desahuciar al inquilino que no paga, no sé si me explico o les hago un plano. Para que aumente los pisos en alquiler hay que agilizar los desahucios en vez de prohibirlos porque se da la paradoja de que un mendigo hambriento lo puedes echar y desahuciar del restaurante si no paga, pero no de tu piso. Te puedes divorciar de tu pareja en el acto, pero no de tu inquilino.
Lo que no sabe el cani laureado con 13 matriculas por la mala enseñanza pública, es que el dinero tiene miedo y por eso, antes de las elecciones, los inversores sacaron de España 19.400 millones de euros en marzo, frente a los 900 millones que inyectaron en el mismo mes de 2014. Y sólo eran municipales. Y si no viene inversión, ni te prestan, no puedes dar a los pobres ni un pirulí.
Se da la cruel paradoja de que los millonarios se van tan ricamente a Luxemburgo o Irlanda y los pobres y la clase media se queda en España sufriendo las veleidades bolivarianas de un Pablito Bananas que en pleno ‘boom’ del petroleo en Venezuela, se fue allí de asesor y ahora tiene mayores índices de pobreza. Y con la oposición en la cárcel por la que ha mediado el valiente de Felipe González.
Arriesgándose, y sin cobrar como el otro pollo, «porque el populismo ama tanto a los pobres que los multiplica», según nos advirtió la guatemalteca Gloria Alvárez en el Parlamento Iberoamericano de la Juventud. Las cenizas de Pablito las tiraremos a la basura algún día o quizás en el solar bolivariano que nos va a dejar.