Antonio F. Marín: Teatro, lo tuyo es puro teatro

15 de enero de 2005

Teatro, lo tuyo es puro teatro

Porque no sé si esto es una página web en el que vuelcas tus menudencias y miserias o un diario de la señorita Pepis en el que también cuentas tus historias, chucherías y minucias. En cualquier caso no tiene mucha importancia lo que escribas porque parece que por aquí no hay nadie, que no se ve gente por el patio de butacas, por la platea, ni por el gallinero. Pero sea lo que sea habrá que evitar ser sincero. Sinceridad: Juas, juas. Esto de ser sincero está muy bien. Uno lo sabe porque se lo han dicho mucho las mujeres a lo largo de la vida.
-Cariño, qué es lo que más te gusta de mí: ¿Mis ojos, mi sonrisa o mis manos?
-Tu culo
-¿Puedes ser un poco menos sincero?
- Ya empezamos
Ya terminamos, claro, porque de todas formas habrá que ser sincero pero evitando el ridículo, que después de todo el sentido del ridículo no es más que un ataque de repentina lucidez.

Mobusi