Antonio F. Marín: Typical spanish

17 de agosto de 2005

Typical spanish

17 militares han muerto en acto de servicio cumpliendo con su deber y 48 lo han hecho en la carretera cumpliendo con su obstinación. Es probable que no vuelvan a morir otros militares hasta dentro de unos años, pese a que estén en zonas de guerra. Y sin embargo sabemos con certeza que el próximo fin de semana morirán otros cincuenta conductores, sin estar en zona de guerra. No sé qué me da más miedo. Corramos pues la cortina, porque el otro día leía una carta al director de El Mundo en el que un lector felicitaba al periódico por exponer argumentos y medidas que mejoraban la calidad de vida de los ciudadanos. Y luego se confesaba “soberanista para la ciudadanía catalana”, aunque consideraba sin embargo que no hay otro espacio para la defensa de las ideas que no sea la razón. Por eso felicitaba al periódico, a Joan Ridao (ERC) y a Joseph Piqué (PP) porque para él representaban un pequeño ideal: “el de la política como lugar de encuentro del talento y no como reducto de
lucha por el poder entre individuos cuya mediocridad no les garantiza un espacio profesional en ninguna parte”. No creo que estuviera pensando en Pepiño Blanco (ese que se parece al mayordomo de las películas de Alfredo Landa), pero quizás sí. Y no tengo más remedio que felicitar a este empedernido votante de Esquerra Republicana porque suscribo lo que dice: la razón frente a la embestida. Aunque me moleste que su voto sirva para que Joan Puig consiga ser diputado de ERC y que una vez elegido se dedique, con el carné de diputado en la boca, a asaltar y embestir la casa de un director de periódico en el más puro estilo castizo y casposo de la España chula, flamenca y bravucona que, en vez de acudir a un juzgado, salta la tapia y se mete en una propiedad privada. “Semos europeos”. “Usted no sabe quién soy yo”, se tuvo que decir el diputado, mientras la Guardia Civil miraba el espectáculo con los brazos cruzados. Ni Valle Inclán lo mejora. Sólo faltaba Lola Flores y Llamazares dando palmas para completar el cuadro flamenco “typical spanihs”. Bordao. Puro Berlanga. Pero que alguien no llame al timbre de tu casa me da más miedo aún que Afganistán y que la carretera.

Mobusi