Antonio F. Marín: Bomba atómica, turismo y fascistas

25 de agosto de 2006

Bomba atómica, turismo y fascistas

Iba a comentar que el delgado de Zapatero del Tinell en la Alianza de Civilizaciones ha abogado porque la teocracia dictatorial de Irán tenga la bomba atómica, porque ya se sabe que el pacifismo empieza por tener bombas nucleares ya que así los aliados podrán dejar que los turistas se hagan fotos con ellas, como en la foto de arriba, mientras lapidan adúlteras y ahorcan homosexuales que también tiene mucho interés turístico. O reunirse entre ellos para tomar el té con unas pastas de megatones, mientras comentan si la bomba les hace juego con los zapatos.

Iba a comentar que los socialistas trasladan los emigrantes a las autonomías gobernadas por la derecha, porque como ellos son de izquierdas reparten la solidaridad en las espaldas de los demás, como nos manda el evangelio de san Pablo Iglesias, pues estos cursiprogres de izquierda

son al socialismo lo que Paco España a la música de cámara. Pero ellos dicen que los sin papeles “no pueden ser trasladados a ciudades que carezcan de infraestructuras adecuadas para acogerlos” (El País), aunque esas infraestructuras “adecuadas” son la puta calle con un bocadillo y un botellín de agua. No, es que los inmigrantes crean riqueza allí a donde van, nos dirán, y entonces que los manden a las regiones socialistas para que no sean sólo las de derechas las que se enriquezcan. Que eso es de egoístas. Hay que repartir la riqueza entre todos.

Iba a comentar que la comisaria del PSOE en Murcia nombrada democráticamente “a dedo”, se ha opuesto a que se construyan 150.000 viviendas a 500 metros de la línea de playa, pero no ha censurado que sus colegas socialistas de Cataluña vayan a construir 100.000 en primera línea de playa cuando Murcia sólo tiene construido el 13,6% de la costa y Cataluña el 39%. Esta es otra pájara, como el socialista presidente de la Confederación, que no se presentan a las elecciones para que el pueblo no los elija, pero quieren mandar, gobernar, porque ya se sabe que todo españolito lleva en su seno un pequeño fascista con gorra de plato que, sin haber ser elegido por el pueblo, quiere decidir quién ha de aparcar y quién no. Iba a comentar todo esto y más, pero me aburre comentar lo obvio y además son las fiestas en mi pueblo. Ayer me asomé a ver la actuación de Coti y el directo se le atraganta, suena a lata con carraspera.

Mobusi