25 de junio de 2008
La refundación, los simios y los tacones de aguja
"El PP vuelve a refundarse", dicen los peritos en churros y merinas; una refundación en la que se van todos, menos el líder; una cosa así como cuando Franco "refundaba "la dictadura y anunciaba "apertura" mediante Fraga, y se quedaban él y Carrero Blanco. No es lo mismo, obviamente, pero la renovación se empieza siempre por el líder y mientras siga Rajoy y Arenas, Trillo o Ana Botella (y sobre todo, Rajoy), el PP seguirá siendo el mismo, aunque a la mona me
la vistan de seda con minifalda, medias y tacones de aguja. Qué le vamos a hacer: uno, que es escéptico.
Muy escéptico, y antipatriota, muy antipatriota, en medio de una crisis económica que ha obligado a Zapatero a vender la vajilla de la abuela, a fundirse los ahorros, mientras sigue aumentando el número ricos pese a la crisis, y una veintena de intelectuales han reclamado reformas para defender el castellano en España, digo, en el estado Español. Como suena. Quién nos iba a decir que cuando suspirábamos por la transición democrática y por la libertad, tendríamos algún día que volver a las barricadas, a luchar por el idioma común; es decir, volver a luchar por lo obvio.
Muerto el dictador hace más de 33 años, seguimos luchando por lo obvio e incluso por lo que ya se había conseguido porque hoy se discute en el Congreso una proposición socialista en defensa de los simios, mientras esos mismos socialistas votan en Europa directivas que recortan los derechos de los inmigrantes y que amplían la jornada laboral. Hay que volver a luchar por lo obvio y por los derechos que ya se habían conquistado. Habrá que hacerse simio para que se acuerden de nosotros.