El Gobierno se ha felicitado por la solución de la crisis con el secuestro de los pescadores del Alakrana. Ya pagó por el Playa de Bakio y ahora lo ha hecho con el Alakrana, y aunque dicen que la Armada disparó a los piratas cuando huían, uno cree que Zapatero dio orden para que los dejaran escapar a posta, porque nos barruntamos que cuando secuestren un tercer barco (y pague), los piratas le darán un juego de café y otro de cama. Para el ajuar y todo eso. Y Zapatero no quiere desaprovechar la oferta.