Antonio F. Marín: Optimixta

10 de mayo de 2010

Optimixta

La actriz Jennifer López nos ha avisado de que no va por ahí ‘mirando el trasero a todo el mundo’. Pues allá ella. Tiene que haber gente pa’ to’ que dijo ‘El Gallo’, pero uno sí que los mira y se embebe tanto en esta actividad extraescolar que a veces hasta se pasa.

Se pasa de ensimismamiento porque el último culo que seguí me condujo fatalmente al hospital. Cuando me di cuenta estaba ya en consultas externas. Tuve que volverme y llegué tarde al Centro de salud, que es a donde iba para hablar de metafísica con el doctor Pascual Lucas.

La Jenni lo dice porque no quiere que la valoren por su culo, como es natural, porque todos preferimos que nos valoren por nuestros millones, pero a falta de pan buenas son tortas, que dijo un confitero demasiado optimista. Nosotros no somos tan jubilosos. O al menos tan optimistas como Zapatero, nuestro Salvador, que ya ha anunciado 10 veces que mañana mismo salimos de la crisis y que de seguir emperrado en sus pronósticos, es muy probable que algún día acierte. Este chico no está valorado como aprendiz de

la bruja Lola. Sus serviles tiralevitas dicen de él que es un optimista que huye de los cenizos. Y tiene razón porque los optimistas están muy bien, son muy útiles, sobre todo cuando quieres ligar con su chica.

Aunque lo que España necesita no es optimismo, sino realismo y sentido de Estado, es decir, un pacto como el que han firmado en Portugal los partidos de derecha e izquierda. El miércoles Zapatero y Rajoy se reunieron y llegaron a un acuerdo sobre...Grecia. Y sobre las fusiones de las cajas, si quieren sus amos regionales. Pero falta un pacto de Estado con un ‘ajuste contundente’ (según El País), que tendremos que hacer tanto si gobierna uno como el otro para salvar el Estado del Bienestar.

Dicen los listos que si Zapatero hace el ajuste le va a hacer el trabajo sucio a la derecha al recortar los gastos sociales, pero quizás es la derecha la que tendrá que hacerle otra vez el trabajo sucio a la izquierda para sacar al país de la bancarrota, como ya tuvo que hacer (tras Felipe González), para entrar en el Euro. Vaya usted a saber. Esto es cosa de sabiondos.

Pero quizás no sea necesario llegar a situaciones tan achuchadas porque Zapatero ya se ha arremangado y ha recortado 16 millones de gastos, que menos da una piedra para el chocolate del loro. Y además nuestras Señorías se han puesto a bregar duro en el Senado y han aprobado que a partir de ahora se comunicarán en euskera, catalán, gallego y valenciano, merced a unos traductores que nos van a costar 750.000 euros al año.

Un arreglo estupendo porque nuestros políticos no se entendían en castellano por la dificultad que supone hablar el mismo idioma. Una vez ladeado este atascadero podrán entenderse mediante unos auriculares que nos van a sacar de la crisis en un pis pas, alabado sea el Señor, aleluya, aleluya. Menos mal que nos queda el culo de la López, oye, que siempre es un alivio. Aunque te lleve al hospital.

(Columna publicada en el semanario de papel El Mirador de Cieza)

Mobusi