Antonio F. Marín: Sólo la puntita que soy doncella

17 de febrero de 2005

Sólo la puntita que soy doncella

He estado esperando pero ya veo que no va ha ocurrir, que nadie va a manifestarse, de verdad, contra el Gobierno catalán que ha redactado un “protocolo” para los medios de comunicación en el que se prohíbe que los periodistas entreviste a los mil vecinos que han perdido sus casas de toda la vida tras el socavón del barrio del Carmelo de Barcelona. También se les prohíbe asistir a sus asambleas, informar de sus decisiones y acercarse al lugar con cámaras y fotos, con la anuencia cómplice de los periodistas afines, adeptos y congregantes que han rechistado sólo un poquito, abonico, no sea que me vayan a oír, ante semejante ultraje a la libertad más propia de un chuloputas bravucón que de un honesto político. He estado esperando a que se pronuncien las asociaciones de la prensa, los sindicatos, las organizaciones profesionales o los consejos de redacción. Nada. Ni tampoco he oído las quejas de los periodistas gráficos que le tiraron en el Parlamento las cámaras de fotos a Aznar para culparlo de la muerte de los periodistas Couso y Anguita. Nasti. Ni a los humoristas gráficos, viñetistas o forgianos chistosos. Algunos tibios apuntes de ciertos comentaristas, para cumplir, y poco más. Sólo la periodista Julia Navarro ha condenado con contundencia semejante tropelía, porque los demás han silbado y se han puesto a comentar lo del edificio Windsor, claro, o la prohibición de fumar en los coches que propone el Gobierno, criticándola, para que luego digan que no se meten con él, que no critican al Gobierno. Y los demás han cumplido la formalidad, de mala gana, como Javier Sardá que entrevistó en su programa a tres vecinos mientras se sentaban entre en público. No se atrevió a llevarlos a la mesa y dedicar el programa en exclusiva al suceso como hizo con el buque Prestige o con los socavones del AVE de los que hizo unos programas monográficos pese a que no hubo ni un solo damnificado. Pero ahora sólo la puntita nada más de protesta, Don Juan, que soy doncella.Pos Después.- Y de comisión de investigación en el Parlamento catalán ni te cuento, María Sarmiento. Son el mismo perro con el mismo collar.

Mobusi