El jefe de estudios del instituto de Hospitalet en el que unos jóvenes han agredido a otros con navajas, ha justificado el comportamiento de los muchachos porque respondieron a una provocación continuada de un grupo de jóvenes "muy conflictivos". Según el jefe de estudios, los tres jóvenes detenidos por la agresión (de nacionalidad dominicana y ecuatoriana), tenían un comportamiento ejemplar en clase y no habían protagonizado ningún conflicto anteriormente. En cambio, los jóvenes que provocaron la agresión, añade Joan Sales, son un grupo de alumnos desclasados y conflictivos que se metían con ellos tirándoles globos de agua. El jefe de estudios del instituto no aclara sin embargo, por qué los jóvenes conflictivos no llevaban navajas y los angelitos ejemplares sí que las llevaban. ¿Cómo explica esto el jefe de estudios? Muy sencillo: Es que forma parte de su cultura, dice el hombre sin despeinarse el tupé. Quiere decirse que responder con navajas a una agresión con
globos de agua forma parte de su cultura y hay que comprenderlo, como también tendríamos que comprender entonces que forme parte de la cultura española que el marido le pegue un palizón a su mujer si se encuentra con la cena fría. Hecho cultural. Como se enteren los abogados de los maltratadotes lo llevamos claro. Podría ser incluso un nuevo eximente: el hecho cultural. Y para la ablación del clítoris que también es un “hecho cultural”. A mí no me preocupa mucho que unos jóvenes se tiren globos de agua en el recreo, quizás porque uno también se ha peleado en el colegio y ha hecho y le han hecho, el “aparejo” o “agarejo”, que consiste en bajarle a la víctima los pantalones, echarle tierra en la pilila y escupirle para que se forme barro, que visto ahora es una humillación de mucho mayor calibre que te tiren globos de agua. Bueno, sí, venga, hombre, claro que me preocupa que los críos se peleen, claro, como le puede preocupar a cualquier adulto responsable, pero lo que me inquieta mucho más es que haya un jefe de estudios que considere que responder a navajazos a una agresión con globos de agua es un hecho cultural. Yo es que soy de otra cultura.