Antonio F. Marín: Faltar a la autoridad

23 de septiembre de 2005

Faltar a la autoridad

Los vecinos de Ducado de Medinaceli (Guadalajara) que increparon a la vicepresidenta del Gobierno cuando acudió allí con motivo del incendio que arrasó miles de hectáreas, han sido multados con 300 euros por “faltar el respeto a la autoridad”. Chachi. A mí también me multaron una vez que insulté a un alcalde pero era franquista y me pusieron menos multa, aunque se conoce que los socialistas al 1% no quieren ser menos y también multan al que “falta a la autoridad”. Cuando éramos pequeños, allá por el franquismo, a los niños se nos asustaba con que se iba a llamar a la autoridad y todos corríamos asustados a refugiarnos en casa. Ahora no sólo que llaman a la autoridad, sino que
además te multan. Quién os ha visto y quién os ve, Maribel, porque Franco también consideraba una falta a la autoridad cuando lo insultaban con aquello del “sapo iscariote y ladrón repartiendo castigos y premios” (León Felipe), pero es que él era un dictador y no se las daba de demócrata. Porque si increpar a los responsables políticos tiene castigo y multa pues los que ocupan el poder “reparten castigos y premios”, qué pena tiene calumniar a alguien llamándolo asesino como se hizo varias veces en la anterior legislatura. Cuál es el importe de la multa. Pregunto. Porque llamar asesino a alguien es atribuirle un delito, mientras que increpar a la vicepresidenta es normal en una democracia madura, mayormente cuando el pueblo se encampana por la ineptitud de los responsables políticos que permite que se arrasen miles de hectáreas de bosque y mueran 11 personas por la incuria de los responsables de que esto no ocurra. No era para insultar, era para correrlos a gorrazos y para obligarlos a dimitir. Por inútiles y sinvergüenzas. Aunque tenga multa. Pero es que se conoce que cuando ellos gritan y llaman asesino a alguien es en ejercicio de la libertad de expresión, pero cuando los insultan a ellos es un ataque personal y una falta a la autoridad que tiene multa y detención de inocentes ciudadanos como se hizo con los que increparon a Bono en la manifestación de la AVT. Con estos no se juega, pues esta tropa paleta, reaccionaria, ultramontana, intolerante y furiosa, castiga y multa porque el franquismo sociológico sigue deteniendo a manifestantes y multando a los que increpan a la autoridad. Qué asco de autoridad. ¿Dónde hay que pagar la multa?

Mobusi