que pasar ha pasado, porque todo consistía en aprovecharse del mundial para lanzar la cadena de los amigotes de Zapatero y la Cuatro de su reverendísima sor Polanco, qué boda sin la tía Juana, que no levanta cabeza desde que se abrió al público y se le dio la opción de competir libremente porque a algunos la libertad y la competencia se les atraganta. Y de paso conseguir una publicidad gratuita para los amigos y obligar a los españoles a que se gasten las perras para “antenizar” esa emisora o forzarlos a que se compren un decodificador para poder ver el mundial a través de la televisión digital terrestre que, en el mejor de los casos, a un pensionista no contributivo le cuesta la mitad de la pensión. Socialismo es libertad…, para elegir entre los amiguetes de la Sexta y los amiguetes de Cuatro. Y de paso atracar a los pensionistas para que ese dinero se lo lleven los colegas de las televisiones que les hemos regalado. Y el muchacho de León con su sonrisa de niño con pito nuevo.
