Es la reina del fetichismo, según dicen, y quiere ocupar el lugar dejado por la mítica Betty Page. No sé si lo conseguirá pero Dita lleva camino. He de aclarar para los neófitos que el fetichismo no consiste en lamer pies como creen algunos (algunos guarros), sino en la devoción a las prendas de lencería femenina principalmente si son de corte clásico de los años 40/50 que, obviamente, ya no se llevan. Rejillas, fajas, corsés, zapatos de alto tacón y medias con costura que se ha puesto tu chica.
Y he de aclarar que gracias a la gente que me escribe, he podido averiguar que son muchos los tíos que se mueren por esta tendencia, aunque sus mujeres no lo sepan. Ya se sabe que los tíos somos más simples que la tecnología de un botijo, es cierto, pero si ellas lo supieran los tendrían a sus pies, nunca mejor dicho. A la mayoría. A mí no porque agacharme me da reúma.
