En vista del nivelezo político que disfrutamos en España a partir de ahora se acabaron los comentarios políticos y me centraré en analizar la carta de Isabel Pantoja en la que dice que es una víctima, pues parece más interesante que las andanzas del mosquetero de León. O en Raul, por ejemplo, que acaba de confesarnos que él no es el culpable de las faenas de
la selección de fútbol, porque cuando él no no es seleccionado el equipo sigue sin ganar.
Podríamos pues pensar que le ha convenido que la selección pierda para que quede en evidencia que él no es el culpable. Más o menos el razonamiento que arguyen los que dicen que los que se oponen a la “paz de ETA” quieren que fracase la negociación y que ETA vuelva a matar para perjudicar al Gobierno. Los españoles somos así de elegantes. De todas formas es una vergüenza que el seleccionar no dimita y que la federación no lo cese porque no tiene dinero. Un éxitazo federativo. País de cuchufleta y chichinabo, ya digo.
