A Fernando Fernán Gómez le han preguntado qué es lo que más admira en la mujer. “En primerísimo lugar, la belleza”, ha respondido el abuelete que parece que tiene bula entre la cursiprogresía para decidir cosas de este jaez sin que lo tachen de machista por no haberse fijado primero en la inteligencia y demás picatostes. Pues vale. Pero ha levantado la veda, porque lo que yo más admiro en la mujer en primerísimo lugar es la belleza de su culo; un culo como el de arriba, ni más ni menos. Y luego su inteligencia, claro, faltaría más. Un culo inteligente siempre es mejor que un culo tonto.
