Antonio F. Marín: Venus de Milo

29 de diciembre de 2006

Venus de Milo

Escribe Raúl del Pozo en El Mundo que Durrell creía que los griegos no pretendían estremecernos de lujuria con la Venus de Milo, sino indagar si la belleza se halla en la proporción. Debe de ser eso. De hecho es cierto que la belleza existe aún en la desproporción y por eso nos parecen artísticas las narices y bocas de Picaso. Y por eso hay muchas mujeres que aunque sean poco atractivas, según los cánones clásicos de la belleza, para mí son guapísimas. De hecho la mayor parte de las mujeres que uno ha amado en la vida han sido más bien normalitas, tirando a feas, pero tenían un seductor atractivo que uno no sabe explicar. Un irresistible embrujo que las hacía bellísimas y nos estremecia de lujuria. El culo también, sí.

Mobusi