Antonio F. Marín: Laicismo, ángeles y magia

14 de marzo de 2007

Laicismo, ángeles y magia

El terrorista asesino De Juana ya está fuera de la cárcel y parece que ETA ha tomado nota, va a hacer un gesto y va a entregar las armas, pero después de los dos asesinatos de Barajas yo ya no me fío de esta recua de pistoleros ni aunque las entreguen compulsadas, con acuse de recibo y ante notario. El que quiera creer que crea y el que no quiera creer que no crea. Libertad de credo porque el credo es libre, tal y como nos propone el director de cine, James Cameron, en su reportaje sobre la recién descubierta tumba de Jesucristo, su esposa María Magdalena, su madre María, su hermano llamado Judas y su perra Pitina. ¿Y la suegra? No se sabe dónde está enterrada la suegra de Jesucristo, pero me conmueve que los que dudan de que el hijo de Dios pueda resucitar (si no lo hace él, no sé quién), a continuación profesen en la creencia en fantasmas, espectros, psicofonías, levitaciones y demás picatostes de la superchería mágica. Porque cada vez la ciencia avanza más y
gracias a la razón vamos desvelando supersticiones y sortilegios que antes asustaban a los ignorantes. Cada vez la sociedad es más culta, tiene más información y los avances científicos nos permiten tener un mayor conocimiento sobre todos los fenómenos que antes desconocíamos y nos asustaban. Cada vez la sociedad es más laica, huye de las religiones y las creencias, de los hisopos y los besamanos, pero sin embargo cada vez se da más la circunstancia de que las televisiones nos avasallan con programas dedicados a fenómenos paranormales, embrujos, espectros, levitaciones y supercherías como Héroes, Sobrenatural, Médium, Entre fantasmas, Eureka, Cuarto milenio, Embrujadas, los 4.400, Next premonition, etcétera. Y todas estas joyas las programan las televisiones laicas que se glorían de conducirse por los caminos de la razón y la Ilustración, no Popular Televisión, que es de la Conferencia Episcopal. ¿Por qué? Por la pela, la puta pela, que a los cursiprogres le gusta más que a un tonto un micrófono. Estos tíos tienen más peligro que estar en España el día de la jornada de reflexión electoral. O sea. Aunque yo sí creo en los ángeles, que conste. Y en las ángelas.

Mobusi