Arrecian las críticas contra el Gobierno por el chanchullo del caso BBVA y sobre las listas de Batasuna, pero la prensa gubernamental continua a cuatro columnas con los asuntillos de la tonadillera, de Isabel Pantoja, con la falsificación de noticias de la CNMV y con la copla pantojil que el presidente del Gobierno se atrevió a cantar en un mitin y en una comisaría de Marbella olvidándose de mirar en sus propias dependencias, bajo sus propias faldas monclovitas de faralae. No importa, porque acaba de empezar la campaña electoral y el PSOE ha vuelto a recordar la guerra de Irak, como es natural, porque el alcalde de Ricote, por ejemplo, puede
llamar a Bush y acabar con la guerra. Es lo suyo. Así que tenemos Pantoja y guerra de Irak, un argumentario intelectual de altura, qué se le va a hacer, y luego se extrañan de que un partido de ciudadanos en Cataluña haya conseguido tres diputados. O que en Cieza, mi pueblo, se vaya a presentar una nueva alternativa, Ciudadanos Centristas Ciezanos, a la que apoyo incondicionalmente porque la encabeza mi buen amigo José Luis Vergara. He puesto el logotipo en el margen derecho, aunque he de hacer constar que mis opiniones no tienen nada que ver con las de esta candidatura. Lo digo porque lo mismo pongo aquí una foto de un coño y la gente, que es muy mala, asocia el coño con la lista centrista. Y lo mismo digo de las opiniones. De hecho discrepo con José Luis en muchas cuestiones, pero lo considero un tipo preparado, inteligente, honrado, independiente y muy válido para el puesto al que aspira. De hecho lo comparo intelectualmente con Zapatero, Acebes, Llamazares o Pepiño Blanco y me da la risa floja porque no hay color. Es como comparar a Montaigne con Jesús Gil. Lo voy a votar, ya digo, y voy a pedir el voto para él saltándome mi juramento de no apoyar nunca a ningún político. Porque él lo merece, no es un político profesional y sus ideas son lúcidas, oportunas, honradas y posibles. Hasta ahora casi siempre he votado en blanco, junto a otros 333 vecinos que también votaron en blanco. Ahora no lo haré porque existe la alternativa de José Luis y de Ciudadanos Centristas Ciezanos, que es una candidatura de gente normalita, que trabaja, paga la hipoteca y se siente defraudada por el dogmatismo ideológico de los grandes partidos que sólo piensan en su cerril corralito ideológico y no saben cómo respiran los ciudadanos. Pues es: los 333 votos en blanco tenemos alternativa.
llamar a Bush y acabar con la guerra. Es lo suyo. Así que tenemos Pantoja y guerra de Irak, un argumentario intelectual de altura, qué se le va a hacer, y luego se extrañan de que un partido de ciudadanos en Cataluña haya conseguido tres diputados. O que en Cieza, mi pueblo, se vaya a presentar una nueva alternativa, Ciudadanos Centristas Ciezanos, a la que apoyo incondicionalmente porque la encabeza mi buen amigo José Luis Vergara. He puesto el logotipo en el margen derecho, aunque he de hacer constar que mis opiniones no tienen nada que ver con las de esta candidatura. Lo digo porque lo mismo pongo aquí una foto de un coño y la gente, que es muy mala, asocia el coño con la lista centrista. Y lo mismo digo de las opiniones. De hecho discrepo con José Luis en muchas cuestiones, pero lo considero un tipo preparado, inteligente, honrado, independiente y muy válido para el puesto al que aspira. De hecho lo comparo intelectualmente con Zapatero, Acebes, Llamazares o Pepiño Blanco y me da la risa floja porque no hay color. Es como comparar a Montaigne con Jesús Gil. Lo voy a votar, ya digo, y voy a pedir el voto para él saltándome mi juramento de no apoyar nunca a ningún político. Porque él lo merece, no es un político profesional y sus ideas son lúcidas, oportunas, honradas y posibles. Hasta ahora casi siempre he votado en blanco, junto a otros 333 vecinos que también votaron en blanco. Ahora no lo haré porque existe la alternativa de José Luis y de Ciudadanos Centristas Ciezanos, que es una candidatura de gente normalita, que trabaja, paga la hipoteca y se siente defraudada por el dogmatismo ideológico de los grandes partidos que sólo piensan en su cerril corralito ideológico y no saben cómo respiran los ciudadanos. Pues es: los 333 votos en blanco tenemos alternativa.
