Entre las clave que los tíos (y tías) ponen para llegar a este blog he encontrado de todo y creo que ya he comentado algunas muy curiosas. Cuando estoy con la depresión, es decir, cuando tengo la lucidez para ver la vida tal cual es, me pongo a ver esas claves y se me quita la melancolía porque es divertidísimo. Veamos: “chicas que follen en Cieza” (éste va perdido), “relatos sexo con la tía” (incestuoso el muchacho), “ser un viejo verde” (que me pregunte a mí), “chicos con braguitas” (esta búsqueda es constante), “quiero ver mujeres musulmanas culonas” (a mí me gustan mucho las culonas, pero, ¿musulmanas?. Si no vas a verle el culo, hombre, aunque lo sientas plenamente). También he visto claves como “Tawnee Stone sin censurar por
la consejería” (no sé qué consejería es pero me gustaría saberlo), “cómo ven las chicas a los españoles” (como te enteres, lloras), “ oler a coño” (delicatessen, según la mujer), “planchando desnuda en la habitación” (a este le va la plancha y a mí las que cocinan la cena, cuestión de gustos). Pero esto es más o menos normal, según mi anormal baremo, lo que llama la atención (poderosamente, porque la atención siempre llama poderosamente), es la clave “facesitting con enanos”.