Antonio F. Marín: Pixing, pissing, pee o lluvia dorada

28 de noviembre de 2008

Pixing, pissing, pee o lluvia dorada

El Gobierno de Zapatero ha decidido invertir 11.000 millones de euros en obra pública municipal. Y no sé si esto es bueno o malo. Sí sé que ha sido una decisión muy correcta y oportuna, concederle el Premio Cervantes a Juan Marsé porque se lo merece y lo teníamos en el olvido. Pero de lo otro no sé y me callo. Ante la duda es mejor abstente, según me dijo un tipo cuando yo pretendía bajar por un balcón de la casa de la novia de mi mejor amigo.

Así que me abstengo porque no sé nada de eso, aunque sí sé de otras historias como la unas chicas catalanas que me tienen en un sinvivir. "Nosotras también vamos por la calle y podemos hacerlo", confiesan en su web. Y uno se imagina enseguida que se trata de las cosas del comer, es decir, del
follar; pero no: las chicas están preocupadas porque no pueden hacerlo en la calle. Mear, no follar.

Ellas van por la calle de Barcelona y no encuentran sitios para mear, al contrario que nosotros que vamos, no ponemos, abrimos la bragueta, sacamos la pirola y a mear se ha dicho, sin ningún reparo y en cualquier esquina. Pues esto es machismo y nosotros sin saberlo. Yo creía que era una guarrada, pero ahora resulta que es machismo. "Pixing es una manera de contribuir a la lucha feminista", proclaman en su web.

Y para ello se centran en las formas cotidianas de sexismo "a las que todas las mujeres somos expuestas día a día", según denuncian. "Hacer pis en la calle, además de estar generalmente desaprobado por las autoridades, está doblemente prohibido para las mujeres. ¿Por qué los hombres lo hacen tan orgullosamente mientras para nosotras es un símbolo de vergüenza? ¿Qué es lo que tenemos que esconder y de quién?", se preguntan metafísicas.


Ante planteamientos tan filosóficos, epistemológicos y ontológicos, uno no sabe qué responder. Tengo que consultarlo, porque no sé si esto es machismo o feminismo, pero hasta ahora creía que era una guarrada, tanto si lo hace un hombre o una mujer. Ellas no piden que las dejen mear en la calle, obviamente, pero plantean que al poder hacerlo el hombre y ellas no, la situación es machista porque se supone que su postura para hacer pipi, es más humillante y no pueden hacerlo en cualquier esquina. No lo creo, pero si ellas lo dicen, así será.
"Pixing es un grito a la libre acción, sin la opresión de marcos patriarcales que opriman la identidad de las mujeres", explican en su web feminista. Quiere decirse, ellas lo dicen, que mear como un hombre es un acto de machismo patriarcal y hacerlo en cuclillas es un acto de sumisión. Podrían haber empezado por ahí.
Yo conozco a muchos que les gusta ver a la mujer en cuclillas, desde abajo, mientras bebien sus vientos, digo sus meados. Muchos a los que les va la femdom D/s y que estiman que mear en cuclillas, sobre su cara, es un acto propio de Dioses. De Diosas. Se llama "lluvia dorada" y es practicada higiénicamente por muchos hombres y mujeres, sin reivindicaciones políticas, sino como un acto de sumisión dentro de la D/s (sumisión consentida y consensuada).
Lo que yo dudo, y mucho, es que poder mear en la calle como los hombres pueda ser un acto de reivindicación feminista. Uno creía en su bendita ignorancia que lo principal, para empezar, era igualar los sueldos entre hombres y mujeres, por ejemplo, pero parece que lo prioritario es poder mear de pie en la calle. A lo mejor consiguen de Zapatero que les repare ese legítimo orgullo. O quizás el Constitucional. Sería todo un avance hacia una sociedad más justa en la que hombres y mujeres podamos mear de una manera más igualitaria. Y solidaria.

Mobusi