No existía mucha oposición de calidad en el PP y la poca que quedaba se ha enzarzado en un rifirrafe entre Esperanza Aguirre y Gallardón por ver quién hace más el ridículo, quién llega más lejos en el juego de espías, "sé lo que hiciste la última semana". Suena a chiste de Gila, pero es verdad, lo juro por Snoopy. Eran pocos, malos y mal avenidos, y como no tienen otra cosa que hacer se espían con el rabo entre ellos a ver qué hace fulanito o a dónde va menganito
por aquello tan común entre los mediocres de eliminar con artimañas al que no puedes superar con los argumentos y la propia valía.
Ya no están ni bien avenidos, ni falta que les hace. Se les ven las vergüenzas y no se cortan. El PSOE había inventado el hacerle la oposición a la oposición, pero la oposición del PP para no ser menos, ha inventado hacerse la oposición a sí misma. Son unos genios.
