Así que ellas saben aviárselas muy bien; tan bien como esos otras eminencias que acaban de fabricar vida artificial (fabricar, que no crear). Unos investigadores que ya andan engolfados con los derechos de autor para patentar la vida por aquello tan científico de las perras y los dividendos. ¿Patentar la vida? Dios fue más espléndido y nos dejó libre la patente, pero los bípedos quieren el monopolio y a partir de ahora el que quiera usar el invento han
de pasar por tesorería, tanto si es una empresa o un medico altruista que busca una vacuna gratis. Dios fue más generoso, ya digo. Y quizás por eso lo crucificaron. No les traía cuenta.
Ninguna, como tampoco se la debe de traer a la derecha ciezana que se enfosca con el arreglo de calles salón (la última ha sido la que fue la primera), y sin embargo no pone fin a los accidentes de tráfico en la ‘curva del cementerio’ en la que ya han muerto varias personas. Siempre se ha dicho que ‘aquí tiene que haber un muerto para que esto lo arreglen’. Y es cierto, menos en Cieza donde ya han muerto varios y seguimos como hace 50 años porque la derecha no obra con rectitud en esa curva, quizás porque ese recodo es ya tan tradicional, y castizo, como las farolas en medio de la acera del Paseo de Ronda. Otro fenómeno pintoresco y de atracción turística. Podríamos vender entradas.
Aunque quizás falten más muertos, que un muerto sepa a poco y entonces el remedio podría consistir que se estrelle en la curva un avión con 300 pasajeros, si son tan amables y por hacernos un favor, mayormente, ya que no vemos otra manera. Sería un gesto altruista por su parte. Morir por una causa justa, oye, que causas justas hay muchas, más que longanizas, pero los sindicatos parece que pospondrán la huelga general porque después del exitazo con la de los funcionarios puede ocurrir que los curritos pasen de sus soflamas.
La gente está muy chuscarrá, pero en plan pasota. Hace unos días el sátrapa marroquí volvió a reclamar Ceuta y Melilla porque se conoce que olfateó la debilidad del Gobierno (como su padre con la Marcha Verde), pero nadie le hizo caso y no se oyeron declaraciones patrioteras, ni las jeremiadas reglamentarias. No se conjuró ningún ‘Santiago y cierra España’ porque cuando estás en la cola del paro pasas mucho del déspota moro y probablemente hagas lo propio con los liberados sindicales. Como el que oye llover y se llama Andana. ‘Next’. Y que te vayan dando.
(Columna publicada en el semanario de papel El Mirador de Cieza)
