Antonio F. Marín: Semana de festividades y alegría de la huerta

19 de marzo de 2016

Semana de festividades y alegría de la huerta


La alcaldesa de Madrid, Doña Manuela Carmena,   ha declarado la Semana Santa como semana de festividades que es como nominar a su cosita  la alegría de la huerta. No procede.   Esta señora  se ha metido con los cofrades   a los que yo he criticado, sí,   pero no permito que vengan extraños y me los toquen. Son míos.  Uno respeta  mucho a esta señora y comprende  sus devociones y que no puede salirse del libreto que le sopla el apuntador. Y si le da o diere por  lijarse la pepitilla, un suponer,  cuenta con mi apoyo y aprecio. Esta chica de Oro es la madre putativa de una  ralea  reaccionaria, ultramontana, intolerante, agropecuaria, cabreada y furiosa que se muestra muy chula, flamenca y bravucona con los curas, y los sagrarios,  pero  hocica sumisa ante los islamistas y los nacionalistas. No pasa nada: el miedo y la caguetilla  son

libres. Eso dicen


Normal. No todos podemos ser valientes y el miedo es un eximente,  pues  también he leído que las cofradías de Semana Santa son reliquias del pasado dirigidas por católicos apasionados. Y no sé. Es casi seguro. Pero eso es tan obvio como decir que las peñas futboleras están integradas por aficionados apasionados al fútbol. Joder con la obviedad. Vivimos en un país de obviedad en obviedad y tiro porque me toca, donde algunas gustan de ser unas zorras para cobrarle a los ejecutivos y meterle un pico en la polla a un carroza llamado Lou Reed. Pues que os aproveche. Muy respetable si Lou Reed os deja y los ejecutivos os untan de dinero, por zorras.

Pero puestos a buscar  entes inamovible y conservadores podríamos fijarnos en las fiestas anuales del PC, las verbenas cañí de las asociaciones de vecinos o el Carnaval laico con unos disfraces que parecen diseñados por Michael Jackson y Fofito tras una larga noche de tripis y anfetas. Es curioso, porque yo que me he metido wkisky en vena, jamás me he atrevido a tanto. Y estando sobrio menos.

Todavía no se lo he perdonado a mi madre
Así que el incívico debo de ser yo y quizás se deba a que  tengo sentido del ridículo, aún borracho, o porque no tengo nada que ver con estas majaderías pubescentes  que son donde el payaso pierde su casto nombre, lo advierto, y cualquier parecido de esos mendas con un servidor  es pura coincidencia vecinal. Puede ser que uno sea ya muy mayor y vuelva a casa, a la infancia, cuando aporreábamos  el tambor y los oídos ajenos, con una lata de grande de atún  sujeta al cuello con cordeles. Entonces no había chinos y  tambores tan baratos. Teníamos que aviárnoslas con imaginación.

Lo que ocurre es que la gente se mata por salir en las procesiones   de Lorca, Cartagena, Sevilla, Málaga o Murcia, mientras que a las convocatorias de  Carmena no va  ni su tía Enriqueta. Y en las procesiones de Cieza ni te cuento, limeño, porque  también abunda la gente que quiere participar hasta el extremo de que a veces concurre más gente dentro de la procesión que fuera.   Y eso jode, verdad usted.

Jode mucho que el pueblo, el adorado pueblo del que  se auto-proclaman  líderes, acuda y pague por vivir lo que sienten, las emociones que son sinceras pues he visto llorar  en Sevilla a más de un costalero. En Cieza también, sí, pero sobre todo en Sevilla, a pie de urna, digo, de calle,  cuando se suspende una procesión por la lluvia y  podemos asegurarle,  señora juez okupa,  que son emociones  que  nunca ha vivido ni sentido porque tiene el corazón de una seta, yermo, en el que nada prospera. 

Todo esto también jode a algunos islamistas, a un imán iraní,  que se ha propuesto demandar la Semana Santa en el Tribunal de Derechos Humanos pues dice que es una ofensa y un menosprecio hacia ellos. Lo tienen muy fácil: puerta. A mi también me ofende la lapidación de la adúlteras y que ahorquen a los homosexuales en grúas, que asesinen a niñas tomadas como esclavas sexuales y demás infamias salvajes que no practican ni los animales.

Y en España Pablito Ayatola Bananas no dice nada, calla como una zorra que se prostituye y recibe dinero de Iran. Presuntamente, claro, pero admitiendo que Irán le paga el teléfono. Y los españoles todo ufanos votando a este cómplice por omisión, pues  calla y consiente.  

Tampoco sé si  el capullo zambombo del imán se refiere a la discriminación que sufren los cristianos en casi  todos los países musulmanes donde no pueden ni entrar, ni tener templos, mientras en España construyen mezquitas. Este chupacirios es tan orejero y cerril que ni tan siquiera sospecha que lo es.  Es como el cerdo que ni sabe que es un cerdo ni que se reboza en la mierda.

Pero tocante a Carmena, que es española, se muestra como la máter amamantisima de los okupas, de los señoritos de nuevo acuñe pues son todos pequeño burgueses que quieren vivir a costa de los españoles de bóbilis bóbilis sin pagar luz, ni agua, ni hipoteca,  porque su cortijo es el Ayuntamiento con  las señoras  Carmena y Colau de patrocinadoras, tanto monta monta tanto, una fulana como la otra. Ya sé que han sido elegidas democráticamente pero ninguna ha ganado las elecciones y están en el cargo de okupas, gracias al pechoe, entre otros. Y luego se preguntan por qué bajan y bajan y bajan en las encuestas.

No me arrepiento y la guardo con mucho cariño
Carmena ha evitado que se creen mil puestos de trabajo al no rehabilitar un mercado abandonado para dárselos a los niñatos  que no tienen huevos a ocupar el trastero de sus padres. Y Doña Urraca Colau le ha pagado la luz y el agua a otros okupas mientras los del Metro se le sublevan por aquello de que una cosa es predicar y otra dar trigo. Todo para que los presuntos artistas puedan hacer sus pinturas de colores, sus recortes de muñecas y sus monumentos de plastilina como ya hacen en el Patio Maravillas de donde jamás ha salido nunca ni un solo genio o alguien que se le parezca.

Deberían dejar la Semana Santa en paz y no herir  los sentimientos de algunos que no saben defenderse por aquello de la otra mejilla. Aunque  Jesucristo creo que no dijo nada de las patadas en los huevos. Que yo recuerde. No soy semansantero pero me jode que una trasnochada arremeta contra lo que no entiende y sea tan sectaria que no sepa interpretar los sentimientos del pueblo, tal y como hizo un propio de Podemos al destinar a los cristianos a que se jodan en una isla  y se hundan con ella.

Eso no es ser mala alcaldesa, sino analfabeta cultural dicho como un diagnóstico y no como un insulto.   Debería estudiar la historia de las religiones, ver la obra de Martínez Montañés, Salzillo o El Greco,   que  aunque no le digan nada, le podemos asegurar que son obras de arte, como las procesiones. Aunque ahora que lo pienso sí que es semana de las festividades pero solo para los que creen en la resurrección y no están muertos para enterrar a  otros muertos.

Mobusi