Antonio F. Marín: Bienaventurados los que... menos los del Catexit

10 de octubre de 2016

Bienaventurados los que... menos los del Catexit

Bienaventurados los que todavía se vuelven para mirarle el culo a una chica que pasa, aunque sea una falta de educación, que lo es, porque significa que todavía estás vivo. O que su novio está de viaje. Bienaventurados todos aquellos que no se aprovechan de la debilidad del caído porque no es de buena crianza, aunque la guerra pueda ser la continuación de la política por otros medios, según Carl von Clausewitz (Clausvitch para los amigos).

Quiero decirse que no es no conveniente ni prudente que el PP haga  más leña del PSOE y se niegue a que se salve de sí mismo   al exigirle algo a cambio de su abstención técnica. Después de todo a Rajoy le quedan dos añitos, como mucho, y debería emplearse en buscar un sustituto  sin  amenazar con nuevas elecciones que, obviamente, perjudicarían a los socialistas. No estaría bien visto.

Aprovecharse de esta adversa circunstancia es precisamente lo que pretende Pablito Bananas al que no le interesa que el PSOE se recupere, deje de podemizarse y vuelva a ser el partido en el que muchos confiamos. De caballeros es ser generosos con el débil, con el vencido y sobre todo, con el que necesita ayuda para no caer en el populismo rancio de Sánchez, Iglesias y Cia.

O en el populismo de los abanderados del Catexit que al igual que el Brexit inglés, se van a comer con papapas fritas. Son así de perullos y no hay que hacerles caso o el caso justo que requieren los niños que te amenazan con que no cago, si no le compras más chuches. Pues no cagues. Pues convoco un referéndum. Pues convócalo. Cada tonto tiene su lápiz o su micrófono y los populistas catalanes tienen el chupete de la independencia por lo que parece cruel quitárselo, y  si no cagan, amenazan, que no caguen,  qué quieres que te diga Charles Villa. A lo peor no hay agua en la piscina y te arrepientes como los ingleses. Tú mismo. 

Mobusi