Antonio F. Marín: En fila...

12 de noviembre de 2017

En fila...


“No estoy seguro de que comparar a Puigdemont con Tintín es adecuado. Tintín siempre encuentra soluciones a las aventuras que hace frente, mientras que Puigdemont ha dejado Cataluña en el caos y la devastación”, ha declarado Guy Verhofstadt, líder del Grupo de los Liberales del que forma parte el partido de Puigdemont en el Parlamento Europeo. Conviene aclarar que Hergé, el autor de las historietas de Tintin, era belga.

A Puigdemont ya puestos no habría que condenarlo por proclamar la independencia de su corrala, sino por dejarnos en ridículo a todos los españoles, incluidos los catalanes. Hasta los letrados del Parlament les advirtieron de que la movida era ilegal, que podía llevarles a la cárcel y ellos siguieron `erre que erre, Martínez Soria´, buscando el victimismo ante los ingenuos. Ahora, ya en la trena, o huidos, sólo les falta la huelga de hambre para completar el pase de modelos.

Y en el `backstage´ el bucéfalo de Rufián que ha salido por fandanguillos y ha mezclado la Gürtel con la actitud de los separatistas, cuando unos 90 políticos están en la cárcel por delitos de corrupción, según el diario Público, y la mitad de ellos por malversación que es de lo que se acusa ahora a los encarcelados.

Rajoy ya está de salida pero mientras leía el Marca enterró a Aznar, Rubalcaba, Conde, Rato, Aguirre, José Manuel Soria, etc., etc., y hasta empresarios, banqueros y periodistas como Jiménez Losantos o Pedro J. Ramírez. Ahora le toca a Puigdemont y sus rufianes que se ha reunido con 200 alcaldes en una discoteca de Bruselas, como una Asociación de Amigos de la Zarzuela. Estos no saben de huelgas de hambre carcelarias reivindicativas, sino de jerigonzas y holganzas.

Aunque Don Pablo de Bananas y Cía. insista, con la filosofía genuina de atasco automovilístico, en que los separatistas están encarcelados como presos políticos. Quien anduvo encarcelado fue Marcos Ana (lo ha
reconocido hasta Garzón de IU) o Antonio Agraz, Antonio de Hoyos y Vinent y Diego San José, que incluso murieron en la cárcel; así que un talcualillo no puede dar lecciones de democracia y libertad cuando no critica que haya presos políticos en Venezuela y trabaja en una televisión Iraní donde ahorcan en grúas a los homosexuales.

Ni aunque lo pregone el New York Times, por cierto, tan amigable de todo lo que perjudica a España (incluida la reconstrucción del canal de Panamá). Este diario apoyó la invasión de Vietnam (luego se arrepintió, cuando ya iban miles de muertos). Y además suscribió la invasión de Panamá, Granada y los bombardeos de Yugoeslavia. Así es que clases de ética de este diario muy pocas. Justitas. Ninguna. Porque además ha comparado a Puigdemont con Lluís Companys (declaró a Cataluña independiente en 1934, con muertos incluidos), cuando a mi solo me recuerda a Ruiz Mateos con el traje de Superman. El Senado norteamericano está investigando la ayuda rusa a los independentistas catalanes, pero los supremacistas no los necesitan pues siguen devotos las creencias como los patitos lo hacen, en fila, con el primero que los guía.

Columna publicada en el periódico El Mirador de Cieza.

Mobusi