Antonio F. Marín: Cumplir la ley, por fin

28 de abril de 2005

Cumplir la ley, por fin

El presidente del Gobierno ha salido al paso del propósito de varios alcaldes de no casar a los homosexuales (incluido el socialista Vázquez), alegando que hay que cumplir la ley nos guste o no nos guste “porque la norma obliga a todos, especialmente a los responsables políticos y negarse a ello sería un incumplimiento flagrante de la ley” (EL País 27.04.2005). Tiene razón. Se ha de cumplir la ley. Por fin. Albricias y aleluyas. Se va a obligar a cumplir la ley y, por consiguiente (Felipe González Dixi y Pixi), se va a exigir a su reverencia don Jesús Polanco que cumpla las sentencias judiciales que lo condenan a devolver las emisoras de radio que se compró ilegalmente, para que no haya españoles de segunda (los que cumplen las sentencias y pagan las multas) y de primera (los amigos del Gobierno que no las cumplen). Por fin vamos a ser todos iguales ante la ley gracias al magisterio y gobierno de este hombre que con su pedagogía nos seduce y enamora. Es mi héroe. Yo cuando era pequeño quería ser como él: Una mezcla de Robín de Batman y de Richard Gere de Alcobendas.
Pos Después.- El Tribunal Constitucional amparó la objeción de conciencia de un guardia civil que se negó a desfilar delante de la virgen. Hay jurisprudencia civil y moral, porque la objeción no te la puede quitar ni Dios. Ni Fidel.

Mobusi