"Procuro que mi guardarropa sea siempre distinguido y sexy. Llevo medias negras, muy a menudo con costura y tacones de aguja, tanto en la calle como en el gabinete. Pelo recogido para parecer más severa, pero dulce, con faldas cortas y ceñidas, chaquetas entalladas de Mugler o Alaïa. Y guantes, sobre todo guantes. Mantengo en mi imagen ese toque golfo, ya que soy instintiva y sensual…para ser siempre la mujer que sangra, la mujer completa, en su sexo y en su cuerpo, aunque en mi mente sea un animal salvaje".
Annick Foucault
El Ama