Antonio F. Marín: Soy de extrema derecha (y II)

7 de marzo de 2007

Soy de extrema derecha (y II)

En vez de indisponerse el PP y el PSOE por el uso del lazo azul deberían mirarse más a sí mismos porque el PP no puede presentarse a las elecciones con las mismas caras que ya perdieron las anteriores (Acebes, Zaplana, Martínez Pujalte, etc). Es ofrecerse al electorado con perdedores, con los que ya han mordido el polvo, con los que el pueblo ha rechazado y volverán a perder. Días y ollas. Y si el PSOE no se carga a Zapatero, será Zapatero el que se cargue al PSOE, además de malograr las justas reivindicaciones del Frente Polisario como hizo ayer en Marruecos para bochorno de la izquierda que no puede caer más bajo. Pero allá cada cual, porque como es natural la izquierda y la derecha no me harán caso porque yo soy de extrema derecha, según la última catalogación cursiprogre por parte de la Charanga del tío Honorio (Zapatero/Rubalcana/Blanco). Tengo que decírselo a mi madre por ver si puedo ver los dibujos animados o si me va a dejar salir a jugar al parque con mis amigos. Y también le he confesar que soy de extrema derecha, aunque el problema reside en qué no
sé qué hacer, cómo me he de comportar al ser de extrema derecha. Y quizás deba adiestrarme en apedrear las sedes del partido contrario y para tal menester puedo acercarme a una sede del PSOE donde me enseñarán a hacerlo con mucha destreza, tal y como ellos hicieron en la jornada de reflexión cuando apoyaron la política antiterrorista del Gobierno por medio de las piedras y los insultos de asesino. Luego tendré que aprender a formar una banda parapolicial para enterrar terroristas en cal viva y para eso, sin duda, me servirán las prédicas de Felipe González y Rubalcaba. Luego tendré que aprender a no dejar hablar al adversario en su propio mitin y para eso nada mejor que acercarme a la sede del Partido Socialista catalán donde son avezados en estos menesteres ya que no dejaron a Rajoy ni a Piqué hablar en su propio mitin. Luego tendré que aprender a premiar a los multimillonarios permitiéndoles que sólo paguen impuestos al 1% . Luego tendré que agenciármelas para conseguir un gran superávit público en caja, para que críe telarañas, mientras el 20% de los españoles viven en la pobreza. Luego tendré que aprender a permitir que la banca española gane conmigo más que nunca en su historia y que luego me financie en Almería mi chalecito, mi vivienda digna de 70 millones de pesetas como han hecho con Zapatero. Así que para ser un genuino fascista de extrema derecha todavía me queda mucho por aprender. Pero tengo buenos maestros.

Mobusi