El día que se ha conocido que el paro ha batido marcas históricas, los informativos de la Sexta han abierto con las agresiones a los árbitros. Y anoche el programa "59 segundos" realizó un monográfico sobre la censura a los obispos pues parece que no pueden hablar si tener el permiso de Zapatero y la cursiprogresía sectaria. Periodismo de altura, ya se sabe, porque el manso siempre tira para el redil y el sumiso necesita como el hambre la severidad del amo.
negociaba con ETA y aquí no pasa nada, pelillos a la mar, porque él y su panda, sólo se entrevistaba con los asesinos "para saber a qué atenerse".
Quiere decirse que le matan a dos ciudadanos y no sabe a qué atenerse, de qué va la película, y entonces se pone ante el espejo, se estruja el magín y se dice: Un cenizo creerá que son vulgares asesinatos, pero las cosas no son blancas o negras, yo soy un talentoso justiciero y voy a preguntarle a los asesinos qué han querido decir con la bomba y con los asesinatos, de qué van y cuál es su rollo. Eso es lo que hay que hacer. Y lo hace. Nos gobierna un genio y nosotros sin saberlo porque somos unos cenizos.
Pero los salarios suben sólo un 2,9%. Un raquítico 2,9% cuando ha subido la luz, el butano, el agua, el gas y los alimentos básicos tanto para ricos como para pobres, igual para todos, aunque unos podrán pagarlo y otros no. Pero eso es la igualdad de la izquierda casposa, reaccionaria y machista del "himen reparado" y de las mujeres de "primera mano" (según El País). Para nuestros cursiprogres la igualdad es que todos paguen lo mismo por el caviar, sin discriminación alguna.