Antonio F. Marín: Jaquetonas, jamonas, mujeronas, etc... (13)

2 de julio de 2015

Jaquetonas, jamonas, mujeronas, etc... (13)

Alison Tyler
Sigo de gresca  con Pavese, el (Cesare, sí) que es mejor que estarlo con toda esta tropa que nos ha venido como un maná del cielo para que veamos la nueva  luz del mundo cuando ellos pretenden alumbramos con candelas. Lo siento pero prefiero a Pavese, ya digo; un ateo  misógeno de izquierdas  muy inteligente, mucho, porque   va el tío y en el El oficio de vivir nos dice que “solo quien pierde la cabeza es sincero”.

Y  lo lees a las 7 de la mañana y te afecta porque  su proclama es verdad verdadera. Pavese era un misógino machista, ateo militante y de izquierdas, pero muchas cuestiones que propone, proponía, son de incuestionable validez. Y ciertas.

No tuvo suerte en el amor, el pobre, y se enamoraba siempre de la mujer equivocada. Era un misógeno despechado al que no obstante comprendo, aunque no justifico, porque servidor tampoco ha tenido suerte. El libro lo he encontrado en la limpieza de las cámaras (desvanes) que estamos haciendo mi hermana y yo.

Y también me he dado  con  una carpeta con fotos y recortes  de hace mucho tiempo, cuando niño o adolescente,  y he comprobado que las fotos que recorté entonces son  todas de mujeres jaquetonas por lo que deduzco que sigo con esta constante en mi vida. La tata era jaquetona o yo la veía así desde abajo.

Megan Jones
No sé. Quizás venga todo de ahí, de la infancia que es la verdadera patria, según Rilke.  La  infancia donde se graba todo lo que luego, de más mayor, reproduces. Supongo, claro, aunque a mí  no se  me haga mucho caso pues como soy sincero, se conoce que he perdido la cabeza, según Pavese.

Pero sí, vale, me gustan las jaquetona en el buen sentido porque en Andalucía se llaman así a las mujeres de caderas anchas y de muy buen ver. También las hay bajitas con caderas anchas que están para mojar pan, pero generalmente suelen ser altas, corpulentas y con curvas, según explican en Adoro Cieza.  No sabía que en Cieza también se dice así, pero yo lo he oído en Andalucía como un  piropo aunque pueda sonar mal, a jaca. Jaquetona, mujerona, jamona, caballona, etc, es la definición para esa mujer de complexión fuerte, caderas anchas y con muslos y brazos rotundos.

Megan Jones
Cierto, a mí me vuelven loco las jaquetonas, mi tata lo era, y quizás venga de ahí  el fetiche, de la infancia donde se graba lo que reproduciremos en el futuro. También tengo el fetiche de  las chicas con un lunar en la comisura de los labios, aunque no sea jaquetona.   Pero mi   tipo ideal de mujer, la que me hace volverme para mirarla   lo representa Alison Tyler, aunque sea una actriz porno (nadie es perfecto). O Megan Jones, aunque sea una actriz porno y   suponiendo que se olvidara de la fusta (por un ratito), que esta muchacha siempre va muy espitosa y acelerá.

Jaquetona clásica
Megan Jones tiene  31 años, es cubana,  morena con ojos marrones y habla un perfecto español, pero sólo mide 1,70 y pesa 57 kilos; aunque tiene unos muslazos  para comérselos a dentelladas "secas y calientes" (M. Hernández). Sobre todo a los que nos gusta más el muslo que la pechuga, es decir, los muslos más que las tetas. Semos fetichistas, qué quieres que te diga.. Sus medidas son  91-66-96, pero sus pechos no son naturales, sino operados. Y demasiado grandes para mi gusto.

Pero Alison Tyler, la jaquetona de arriba,  da miedo y ganas de comérsela (a besos). Tiene 25 añitos, morena, ojos azules y con una estatura de 1,80 y 77 kilos de peso, luce un pecho natural, aunque excesivo; es decir, tan alta como el que suscribe y sin operar. Una buena jaquetona con medidas: 91-76-94 que está para comérsela o rendirse en plan “soy tuyo: haz conmigo lo que quieras”.

Y a mandar, que para eso estamos. Aunque no le perdonamos que lleve un tatuaje, pues son muy ordinarios. El de ella dice: "Había una vez una chica que no conocía el amor hasta que un chico le rompió el corazón". Pues eso. Y además está casada con un productor de pelis porno que, suponemos, no será nada celoso. Yo tampoco.


(Cieza, Diario de un  dromedario. 2 de julio)

Mobusi