Antonio F. Marín: 300

13 de diciembre de 2015

300

Cuando ellas ven cine erótico se fijan más en las mujeres que en los hombres, eso dicen, y es normal pues a mi me pasa lo mismo. Incluso con el erotismo lésbico pues el 21,3% de ellas también lo prefiere, pero se lo callan cuando podrían hablar con su pareja para comprar una camisa de cuadros y montarse un cuadrito ‘lesbian chic’ que tanto nos gusta a los tíos; esa chica andrógina de pelo corto y lacio, cuello estilizado y camisa de cuadros, según advierte Rosa Palo.

Es lo que hay. O debería haber, porque un servidor se va a callar durante algún tiempo porque no tengo nada nuevo que decir y ya nos avisaba el director de orquesta Herbert Von Karajan que el arte de dirigir consiste en saber cuándo hay que abandonar la batuta para

no molestar a la orquesta.’

Y además ya tengo todo el pescado vendido, la obra hecha y la vacuna contra la gripe bien puesta. Todo está ya escrito y repetido en 4 novelas y 300 columnas (más otras 100 en La Prensa Local). Y por añadidura los debates parlamentarios se han trasladado a la tv o los ‘muros’ del ‘face’ o ‘tuiter’ donde se venden motos, muñecas de plástico ecológicas y tanques a pedales.

Ya no se oye la exaltación de la prima de riesgo, la crisis de Grecia, las peticiones de rescate por parte de bancos, grandes empresas y periódicos, pues nos preocupa más quitar los belenes de los centros públicos. Incluso los venezolanos han barrido el populismo 4.0. Pero el deporte de quitar belenes se mantiene, aunque no lo practiquen en función de la razón, sino en razón de joder a otros que es el deporte favorito en España.

Un deporte de la sinrazón que ha minusvalorado la filosofía de la Enseñanza, aunque la filosofía trace el camino y la ciencia lo asfalte. Uno le ha buscado desde muy niño el sentido de la vida y me he topado con que el único sentido de la vida es ‘pasarrateárla’ buscándolo. Pero la gente no quiere leer angustias, sino que le alegren la romería hacia la muerte. Lo ha reconocido hasta Vargas Llosa que está convencido de que la novela contemporánea «degrada la tradicional; solo entretiene».

Así que han afeitado la filosofía no vaya a ocurrir que la gente se de dé al vicio de pensar y después de todo ya nos advertía Cioran que el ‘sentido de la vida’ no tiene sentido porque su sentido es no tenerlo. Ni buscárselo tal que hacía mi perro Trosky pues él no le buscaba ningún sentido y vivía en su felicidad animal de olerle el coño a la perra que pasaba, reproducirse, comer y vivir el gozoso regocijo de no hacerse preguntas y no tener religiones ni otros apegos.

Un comportamiento muy racional de los animales irracionales. Paradojas de la vida: hemos pasado del mono irracional al ser humano racional que quiere volver a ser irracional para no buscarle sentido a la vida, como el mono. ‘No pensar y cultivar el jardín’, según Voltaire.

Es lo que hay, ya digo, porque cuando no tienes nada nuevo que añadir mejor te callas. Estoy seguro de que los jóvenes tienen más cosas que decir. Feliz Navidad.

Columna publicada en el periódico El Mirador de Cieza. 

Mobusi