Antonio F. Marín: Los comensales muertos

6 de julio de 2016

Los comensales muertos

Ya lo había notado, había visto a  parejas que llevan  tanto tiempo juntas que las ves en las terrazas sin hablarse, mirando cada uno para un lado o sumidos en sus pensamientos porque no saben qué decirse. Me daban pena, pero es que llevan tanto tiempo juntos que no tienen nada nuevo de qué hablar.  Quizás por eso he huido del matrimonio. O por otras cuestiones, claro, pero esta es una de ella. Otras son menos comunes como que te echen en cara que eres  un pesado que habla mucho o un perfecto empalagoso por hacerles mimos y caricias. Sobre todo esto último. Ya no he vuelto jamás a ser empalagoso.

Me lo ha recordado un artículo del New York Times; un escrito de una mujer que descubre de pronto que su matrimonio se ha convertido en uno de esos que dan tanta pena en los restaurantes: los comensales muertos. No tiene desperdicio. Es delicioso porque sabe a realidad, a sinceridad, a planteamientos serios para respetarse y corregir lo que se envicia con el tiempo por el uso. Lo que ocurre una vez pasada la pasión y cuando la pareja lleva tanto tiempo juntos que no saben qué decirse que no se hayan contado ya, porque el invierno llega según Rocio Jurado y  se rompe el amor de tanto usarlo pues ninguna flor dura dos primaveras.


En fin. Son las 05:43 de la mañana y no puedo dormir. Me levanto me hago un café para despabilarme pero no me hace nada. No es cuestión de volver a la cama. Si lo hago ya no curro. Hace calor, me quito la parte de arriba del pijama y abro la ventana, mi serviola. Entra un  fresco agradable, pero intuyo que hoy va a hacer de nuevo calor.

La prensa:  El País editorializa sobre el problema de las pensiones. Viene a decir lo que yo dije aquí ayer y no es mérito de nadie porque la cuestión es la misma: la gente vive más y los que mueren tienen las pensiones más bajas que los que entran en el sistema que son mucho más altas. La quiebra es inevitable. El País argumenta que la solución que yo plantee aquí, la propuesta del PSOE para sacar las pensiones de viudedad del sistema no es viable, pero no da alternativa. Lo que sí dice es que los políticos tendrán que enfrentarse al problema. Pero ellos se entretienen masturbándose con una silla.

Claro, han descubierto la pólvora, pero en 2018 no habrá dinero para pagar las extras y en en unos pocos años más no lo habrá para pagarlas mensualmente. Para mi es la crisis más importante que tiene España. más que el paro si consideramos que el 33% de la población vive de las pensiones y se ha aguantado la crisis gracias a ellas pues los abuelos las han utilizado para ayudar a sus hijos. Pero los políticos siguen con el rigodón a ver quién es más guapo y más chulo. No son más egocéntricos, orgullosos y narcisistas porque no pueden. Lo advierto: si hay terceras elecciones voto nulo y que os vayan dando mucho por el culo. Hijo putas, voy a escribir en la papeleta. O me cago en tos vuestros muertos pisaos.

Otra lista, la alcaldesa Carmnena, ha autorizado el día sin bañador en las piscinas de Madrid. Pues que bien, pero eso no es nudismo. Es echar a los demás para poner a otros. Veremos el exitazo que tiene porque me barrunto que sólo acudirán mirones, reprimidos y Pepitos Chulopiscinas, tanto para ver coños como pollas.  Por un día los baños de las estaciones de autobuses van a quedar vacíos. Lo ideal es compartir pero sin echar a nadie porque las piscinas municipales suelen ser familiares  y ese día quedarán privados de acudir. No se enteran de qué va el nudismo, aunque lo haya pedido una asociación de Madrid, claro. Para empezar del respeto mutuo. Unos aquí y otros allí, cada mochuelo en su olivo y todos tan contentos.

Otra gracia de la alcaldesa capitalina ha sido crear una especie de Jurado Popular y gestores de barrio que solventen las diferencias entre  los vecinos, incluidos los delincuentes. La oposición dice que son soviets al estilo de los que hay en Cuba y Venezuela (y los que hubo en las URSS), pero se llamen como se llamen no son legales y lo único   que hay que hacer es  la trompetilla para pasar de ellos y si se ponen tontos denunciarlos en el juzgado por amenazas, intromisión en tu intimidad, coacciones, etc,  y por supuestos no hacerles ni puto caso. Con los tontos no se puede discutir porque te pones a su altura. Hay que ladearlos y seguir tu camino.

Junta Vecinal y Gestores de Barrio de Carmena
También pretende crear una "policía comunitaria vecinal", es decir, una panda de porteros de discoteca que hagan cumplir los acuerdos y que llevarán bate de béisbol y pistola de agua porque lo demás está prohibido. Dicen que algunos vecinos no se llevan bien con la policía y por tanto hay que crear una policía que se lleve bien con ellos. Desopilante. ¿Y por qué no una tía buena en tanga que los abanique?... Con la policía no hay que llevarse ni bien ni mal. Hay que respetarla y punto. Y se acabó el problema. Se estudia (o debería) en párvulos. Porque eso de que la policía comunitaria vaya en plan chuloputas vecinal no está muy bien visto, Carmencita, hija, que no te deseamos lo que los de Podemos desean a los jubilados (que se mueran pronto), pero sí que en la residencia  te esperen pronto con globos y guirnaldas.

Ya ha amanecido, por cierto, y voy a desayunar. La gente sigue a lo suyo de trabajar más para ganar más y poder comprarse una cama mejor que le permita descansar más para trabajar más, ganar más  y poder comprarse una cama mejor que le permita...etc, etc, etc,. Fin.

Buenas noches y buena suerte. 

Agenda:  08:30. Mercadillo con mi hermana (hoy no hay paseo). Ver si soy millonario con la bonoloto.  Imprimir de una vez lo escrito el verano pasado y empezar a tachar, clasificar y ordenador de acuerdo con el mcguffing del libro. Pero para eso tengo que ir a la biblioteca y no tengo muchas ganas. Pero esta mañana iré. Hace meses que no voy ni por la mañana ni por la tarde. Pero hoy tengo que ir (probablemente mañana y tarde). Es fudamental para poder seguir.

Mobusi