Antonio F. Marín: Buscar pareja

3 de junio de 2017

Buscar pareja

Los consejos te los dan en las revistas frívolas  de Internet:  «Querer encontrar pareja no significa que debas admitir un 'todo vale' en tu vida». Y además te aconsejan que escribas  en un bloc  los límites que quieres poner a las personas que entren en tu vida. Piensa en lo que te ha funcionado en relaciones anteriores y lo que no ha funcionado y no quieres tolerar nunca más, añaden.

Algo de razón tienen, verdad usted, porque servidor no está en contra del matrimonio,  pero no me he casado porque todas me han dicho que no. Así que hay que abrir la libreta y anotar  todas estas circunstancias, aunque   como escribía  Pessoa en el “Libro del desasosiego”: «No tengo nada en mi pasado que recuerde con el deseo de repetirlo». Pues eso.

 Y  lo que suele ocurrir es que   cuando arribas a cierta edad no quieres verte ni a ti mismo, no aguantas a nadie y la soledad se convierte en un bien  que no tiene precio. Bueno, el precio de disfrutar de tu zona de confort sin que ninguna mujer venga a regañarte porque te has confundido al comprar el Finish en vez del Calgón.  O viceversa. No lo vas a permitir
Y mucho menos que te  bajen la pensión porque hace unos días, el Banco de España se ha mostrado algo pesimista en cuanto al futuro del sistema público de pensiones. De hecho, no descarta bajarlas y no sólo apuesta por retrasar la edad de jubilación más allá de los 67 años sino también obligar a combinar ahorro público y privado.

Te bajan la pensión y te  retrasan más la edad de jubilación, pero podemos alegrarnos porque tenemos soluciones para otras cuestiones muy principales como que los adictos al móvil puedan esperar al cambio de semáforo con mayor comodidad y sin tener que levantar la cabeza. En Salamanca ya  han  instalado las lucecitas  en el suelo de uno de sus cruces para mayor comodidad de los adictos al
móvil.

Una medida que se ha puesto en práctica en  otros países y que también disfrutan ciudades españolas como Elche o San Cugat del Vallés.  Se trata de  instalar  unas luces led en el suelo y que el cambio colores avise a los peatones que fijan su mirada en el móvil  y evitarles así el sacrificio de tener que levantar la cabeza para mirar el semáforo. Una decisión propia de cretinos  cuando   todavía quedan obstáculos para los invidentes, por ejemplo, que a veces tienen que jugarse la vida para salir airosos de la expedición. Toldos, terrazas, casetas para fumadores, carteles en la puerta impiden que un invidente pueda transitar con libertad por las aceras.

Te bajan la pensión, te alargan la edad de jubilación y todavía son necesarias las «marchas por la dignidad» como la que se ha celebrado  en Madrid organizada por IU-Verdes. «Pan, trabajo,  techo, igualdad».  O los comedores sociales (el de Cieza no es de Cáritas, por cierto, sino de la asociación Piedras Vivas). No importan todas estas necesidades porque  podemos estar tranquilos pues unas lucecitas en el suelo  avisan de cómo andan los semáforos a los pobrecitos que van todo el día mirando el móvil. Otra conquista social histórica que te permite también mirarles el culo a las chicas sin necesidad de levantar la cabeza.

Columna publicadada en el periódico el Mirador de Cieza.

Mobusi